Todo ocurrió este martes cerca de las 16, cuando el móvil que patrullaba la zona de ruta 77, a la altura del kilómetro 24.600. Al pasar frente a la cervecería Patagonia, los efectivos notaron a dos hombres observando con detenimiento un Renault Logan blanco detenido sobre la banquina. La escena llamó la atención por la forma en que ambos se desplazaban alrededor del vehículo.
Al notar la presencia policial, los individuos se dirigieron hacia otro auto estacionado a pocos metros: un Renault Kwid con vidrios polarizados. Dentro del rodado se encontraba una mujer, lo que sumó un nuevo elemento a la situación. Los agentes decidieron intervenir y solicitaron la identificación de los tres ocupantes.
El conductor del Kwid, de 24 años, domiciliado en el barrio Frutillar. Su acompañante, de 37 años, del barrio 154 Viviendas; y la mujer, también de 24 años, con domicilio en el paraje El Foyel, sobre la Ruta Nacional 40. Todos se mostraron colaborativos durante el procedimiento.
Sin embargo, en una rápida inspección, los uniformados encontraron hallaron una llave inglesa modificada y una ganzúa metálica de aproximadamente un metro de largo. Estos elementos, por su forma y ubicación, reforzaron la sospecha de que podrían estar abriendo autos estacionados. Se detuvo de manera preventiva, de acuerdo con el artículo 11 inciso a) de la Ley Orgánica Policial 5184, que habilita la averiguación de medios de vida ante conductas que generan alerta.
La presencia activa de la Policía en zonas estratégicas de alta concurrencia de turistas permitió detectar una situación anómala antes de que se concretara un posible delito.